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Reseña: Pedro Páramo - Juan Rulfo

Sinopsis:
Años cuarenta del siglo pasado. Alentado por su madre en el lecho de su muerte, Juan Preciado viaja cargado de ilusiones en busca de su padre, a quien no conoce. Pero al llegar a Comala, el lugar donde le dijeron que vivía, sólo encuentra recuerdos... Los recuerdos de todo un pueblo en torno a ese hombre, Pedro Páramo: de cómo se convirtió en el patrón de la hacienda más importante de la región; de cómo mató, extorsionó o utilizó a todos sin escrúpulos; de cómo se enfrentó a la revolución; de cómo, por culpa de su frustrado amor por Susana San Juan, terminó por pudrirse en vida... y Comala entera con él. Tanto es así que Juan empieza a sospechar, a su llegada, que todos los que habitan ese lugar no son otra cosa que almas en pena...



“Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo”



Opinión:

He vuelto a leer Pedro Páramo desde que lo terminé por primera vez en mis años universitarios, lo hice porque sé que es un joya de la literatura hispanoamericana y la primera lectura se me hizo compleja y la seguí a trompicones, aunque es corta su complejidad me detenía, no por ello dejó de apasionarme, sobretodo su final que me tomó por sorpresa y me hizo comprender el porqué de la historia; pero fue un segundo encuentro con la obra de Juan Rulfo lo que me hizo ver la grandeza de tan corto relato.

La novela fue la única publicada por Juan Rulfo en 1955 y pasó a convertirse en una obra cumbre de la literatura hispanoamericana, normalmente adscrita al realismo mágico. El lector se ve confrontado con un aura oscura y decadente que atrae, contexto tal en el que se desenvuelve el protagonista Juan Preciado, quien se dirige al pueblo de Comala en busca de Pedro Páramo, su padre, todo esto por petición de su madre momento antes de morir. 

El pueblo es un lugar gris y melancólico, como si quien llegara se sumergiera en una ensoñación constante, de apariencia fantasmal y desierta, sin embargo, allí se encuentran habitantes que conocen a Pedro Páramo y hablan de maneras misteriosas revelando poco a poco quién es aquel hombre, además van contando como Comala se ha transformado en el lugar decadente al que llegó Juan Preciado. 

La novela fue creada con una prosa hermosa que raya con lo poético, y que hace sentir la melancolía que ronda a Comala, un lugar fantasmagórico lleno de recuerdos que vibran en sus casas y en sus calles. Nuestro protagonista se ve engullido desde el principio por aquella aura y en su cabeza rebotan ecos de voces del pasado, palabras que no comprende y que al lector confunde si está desprevenido. 

Tal vez no haya punto de comparación, tal vez sea un sacrilegio literario, pero si han llegado a jugar Silent Hill sabrán la zozobra y el sentimiento casi claustrofóbico que produce un lugar que en apariencia está deshabitado, así es Pedro Páramo, una novela que presenta la muerte a cada instante, pero a diferencia del videojuego, no la muestra de manera aterradora sino nostálgica y melancólica.

Imagino que a estas alturas quien se tope con Pedro Páramo sabrá cual es la característica en común de todos los personajes e incluso del narrador, pero para aquellos afortunados inocentes, ajenos a la novela, no les daré un spoiler devastador; aunque me sabrán perdonar si ya lo hice veladamente a lo largo de este escrito. De cualquier forma leer la novela los llevará por un camino que todos recorremos y que terminará donde todos terminamos.


 Calificación: 4/5 

                                                                    


Juan Rulfo



(Sayula, México, 1918 - Ciudad de México, 1986) Escritor mexicano. Un sólo libro de cuentos, El llano en llamas (1953), y una única novela, Pedro Páramo (1955), bastaron para que Juan Rulfo fuese reconocido como uno de los grandes maestros de la narrativa hispanoamericana del siglo XX. Su obra, tan breve como intensa, ocupa por su calidad un puesto señero dentro del llamado Boom de la literatura hispanoamericana de los años 60, fenómeno editorial que dio a conocer al mundo la talla de los nuevos (y no tan nuevos, como en el caso de Rulfo) narradores del continente.

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2 comentarios

  1. Acabo de terminar la novela y llegué buscando otras opiniones. La novela me pareció una belleza pero te deja un sabor muy triste.

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